Hace algunos años ya, concretamente desde que se creó la compañía de circo, que el hombre elefante está perdida e irremediablemente enamorado, hasta las trancas diría yo, de la contorsionista. Ella, en cambio, se muere por los huesos de un señor muy recto, teniente coronel del Ejército del Aire, que solo tiene ojos para un policía antidisturbios, que, ironías de la vida, ha perdido la cabeza por una manifestante antisistema, roja, okupa, bisexual, atea y de Carabanchel, que no se atreve a confesarle su amor a un sacerdote, que a su vez ama en silencio a un monaguillo imberbe que se quedó prendado, vaya usted a saber por qué, de la mujer barbuda, con la que no tiene absolutamente nada que hacer porque hace algunos años ya, concretamente desde que se creó la compañía de circo, que está perdida e irremediablemente enamorada, hasta las trancas diría yo, del hombre elefante.
FIN
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Bienvenida/o. Gracias por comentar.